15 señales de que deberías consultar con un nutricionista

15 señales de que deberías consultar a un nutricionista dietista profesional

Nutricionista dietista en Sevilla

Usualmente cuidamos de nuestro cuerpo de múltiples maneras: vamos al gimnasio, nos hacemos una revisión médica, vamos al dermatólogo y al quiropráctico, para cuidar nuestra piel y nuestra espalda.

Pero, lo más probable es que haya una cita importante que no has incluido en tu agenda: ver a un nutricionista.

Lo que un oftalmólogo hace por tus ojos, un nutricionista lo hace para que tu sistema digestivo y tu cuerpo funcionen sin problemas.

Este especialista debe asegurarse de que recibes los nutrientes adecuados, ayudándote a diseñar el plan de alimentación que mejor se adapte a ti, ya sea tu objetivo perder peso, aprender a llevar una dieta vegana saludable o aumentar tu consumo de hierro.

Esto está bien como teoría, pero, en la práctica, solo vamos cuando aparecen señales de alarma. ¿Cuáles son esas señales?

1. Crees que tienes una alergia o intolerancia

Antes de empezar a eliminar alimentos de tu dieta, es una buena idea consultar a un nutricionista dietista profesional.

Aunque hay mucho intrusismo en esta profesión, cualquiera puede llamarse a sí mismo nutricionista, hay que asegurarse de consultar con profesionales que tengan experiencia y formación verificables para poder hacer recomendaciones de importancia, como aconsejar no incluir grupos enteros de alimentos en una dieta.

Un nutricionista titulado puede ayudarte a determinar si tus síntomas se deben a una alergia o intolerancia o a otra cosa.

También puede indicarte si necesitas ver a otro especialista, qué tipo de especialista debes visitar.

Seguir los pasos adecuados es crucial para obtener un diagnóstico fiable.

Por ejemplo, mucha gente no sabe que para obtener un diagnóstico correcto de intolerancia al gluten o de enfermedad celíaca, es necesario consumir gluten en el momento de la prueba.

Un nutricionista dietista te guiará en esto, te orientará sobre la dieta correcta y se debe asegurar de que no desarrollas ninguna deficiencia de nutrientes en el proceso.

2. Eres irregular

Esto es importante. Según la mayoría de los médicos, se debe ir al baño de una a dos veces por día.

Si te estás saltando días sin ir al baño, habla con un nutricionista sobre los cambios a realizar. Si aún no estás convencida de que necesitas ver a un profesional, intenta eliminar de tu dieta los alimentos que producen estreñimiento. A veces solo eso ayuda, pero si no lo resuelves, consulta con un experto y te ahorrarás muchos problemas de salud.

3. Sientes molestias y dolor estomacal o intestinal cuando tomas lácteos

Gases, hinchazón, diarrea… podría tratarse de tu consumo de lácteos.

Podrías ser intolerante a la lactosa.

La intolerancia a la lactosa depende a menudo de la cantidad de lácteos que tomes. A veces, con un par de cucharadas de helado puedes estar bien, pero una taza puede llevarte al límite.

Un nutricionista te hará un diagnóstico correcto y te dirá qué lácteos puedes tomar y cuales no, así como qué cantidad tomar.

Y si no puedes, se asegurará de que puedas obtener todos los nutrientes de los productos lácteos de otra manera.

4. Has probado todas las dietas que existen y nunca ves resultados

O lo recuperas todo al poco tiempo de haber bajado de peso.

Cualquiera que sea el obstáculo, un nutricionista puede ayudarte de forma reflexiva y eficaz:

• Te indicará qué cambios adecuados debes hacer en tu estilo de vida, en lugar de seguir un plan de dieta específico.
• Está capacitado para enseñarte comportamientos y hábitos saludables, así como identificar los perjudiciales.
• Te explicará la ciencia detrás de los alimentos y su asimilación en tu cuerpo, cómo lograr el equilibrio en tus elecciones diarias de alimentos, y como mantenerte motivada durante todo el proceso.

5.Tienes acidez o reflujo ácido

Un nutricionista dietista puede ayudarte a minimizar los síntomas del reflujo ácido indicándote una dieta adecuada, antes de visitar a un especialista digestivo, y si tienes algún problema serio, incluso en colaboración con él.

Esto puede ayudarte enormemente.

6. Estás notando que tu apetito ha aumentado o disminuido mucho

La disminución severa del apetito o el aumento de éste podrían ser señales de advertencia de tu cuerpo de que algo hay que revisar.

Un nutricionista probablemente tendrá que colaborar con un especialista digestivo, de nuevo, para estudiarlo, por lo que visitar a un nutricionista es un buen punto de partida.

7. Te acaban de diagnosticar colesterol alto

Con la orientación de un nutricionista dietista titulado, sabrás qué alimentos elegir y cuáles evitar para reducir el colesterol. De esta manera, podrás reducir rápidamente las posibilidades de sufrir una enfermedad cardíaca o accidente cerebrovascular.

8. Haces todo bien y sigues sin poder bajar de peso

Estamos hablando de una constante falta de capacidad para perder peso a pesar de hacer llevar una vida sana, con ejercicio, comiendo bien y durmiendo lo suficiente.

Una buena nutrición es mucho más de lo que parece. Consultar con un nutricionista dietista puede ayudar a evaluar algunos de los errores que cometes y de los que no eres consciente.

9. O, si sólo quieres perder peso en general

Perder peso y perder peso de forma saludable son dos cosas muy diferentes.

Aprender a perder peso -mientras se come de forma saludable y se evitan las deficiencias nutricionales es la clave para mantener una buena salud e incluso mantener el peso.

10. Sufres estrés o momentos de especial reto en tu vida

Adaptarse a los recovecos más difíciles de la vida es un buen motivo para acudir a un nutricionista porque son como un psicólogo para tu cuerpo.

Tanto si te acabas de enterar de que estás embarazada, como si te acaban de diagnosticar diabetes o has decidido entrenar para una maratón, ¡un nutricionista titulado puede ayudarte a afrontar el reto de frente!».

Un dietista está formado en todas las áreas de la nutrición y entiende cómo la dieta correcta puede ayudar o perjudicar tu vida.

Algunos dietistas incluso se han especializado en pediatría, en educación para la diabetes y nutrición deportiva y conocen las últimas investigaciones en estas áreas.

11. Estás pensando constantemente en la comida

Espera, ¿no todo el mundo piensa en su próxima comida todo el tiempo?

Sin embargo, si te preocupas con frecuencia -y te obsesionas- con tu próxima comida, es hora de consultar con un nutricionista.

Si piensas constantemente en su próxima comida, e incluso te acuestas pensando en el desayuno, es hora de concertar una cita.

Cuando estos pensamientos no están alimentados por el hambre, sino por una ‘obsesión’ por la comida, podrían ser los primeros signos de un trastorno alimentario.

A veces, aprender un poco más sobre la ciencia de la nutrición de la mano de un dietista puede conducirte por un camino más saludable.

12. Eres propenso a las fracturas óseas por estrés

Esto es más común de lo que crees.

Un profesional puede llegar a saber si se deriva de algo como la falta de calcio, el exceso de ejercicio o algo más.

Pueden comprobar si estás recibiendo los nutrientes adecuados para la absorción del calcio y unos huesos fuertes, como la vitamina D y la vitamina K, por nombrar un par.

13. Comes en exceso o te das un atracón cuando te sientes emocionado

Ya sea que te excedas cuando estás ansioso, triste o incluso feliz, esta es una bandera roja si no puedes disociar el sentimiento del hábito.

De lo contrario, puede conducir a patrones poco saludables dando lugar al aumento de peso y todas las enfermedades asociadas como la diabetes, las enfermedades del corazón y el cáncer.

Un dietista (y, a veces, en combinación con un psicólogo) puede ayudarte a lidiar con las emociones para que puedas vencer el exceso de comida.

14. Te sientes a menudo demasiado cansada

Tienes un trabajo a tiempo completo, una actividad secundaria, tres mascotas, hijos y un marido. En pocas palabras, estás agotada.

Es probable que no te estés alimentando adecuadamente para mantener esa apretada agenda.

Un nutricionista dietista titulado se asegurará de que estás proporcionando a tu cuerpo combustible de forma consistente a lo largo del día, y que estás eligiendo los alimentos adecuados para alimentar tu cerebro y tus músculos, y evitar los bajones de energía y las caídas.

15. ¡Quieres tener un bebé!

¿Estás intentando quedarte embarazada? Un experto nutricionista dietista te puede ayudar a preparar tu cuerpo para tener un embarazo lo más saludable posible, y asegurar que tu bebé está recibiendo todo lo que necesita.

¿Te has decidido ya a consultar con un nutricionista dietista en Sevilla?

Nutricionista dietista en Sevilla: Mejora tus hábitos alimentarios con nuestra Unidad de Dietética y Nutrición en Carmen Sarmiento

Belleza y salud son dos conceptos que van de la mano.

En Carmen Sarmiento disponemos de servicios de dietoterapia y nutrición. Son la clave para mantener la imagen que deseas.

Los problemas estéticos, en algunos casos, como la grasa localizada o la celulitis se derivan de unos malos hábitos alimenticios o del sedentarismo propio de tu rutina. Te ayudamos a cambiarlo.

¿En qué consisten las sesiones de dietoterapia y nutrición?

Las funciones principales de esta unidad son estudiar tus hábitos alimenticios y tu metabolismo. Gracias a esto, podemos ofrecerte una tutoría nutricional completamente personalizada.

Nuestra unidad está compuesta por un equipo de profesionales que estudiarán tus objetivos y tu estado inicial para crear unas pautas alimentarias personalizadas.

Principalmente se compone de dos campos de acción:

• Nutrición: que conseguirá que goces de un estado de salud a nivel nutricional perfecto.
• Dietoterapia: que creará unos regímenes alimenticios personalizados para mejorar tu estado global.

De esta manera, conseguiremos que tus hábitos alimenticios mejoren notablemente para que consigas que tu peso disminuya o se mantenga dependiendo de lo que desees.

Una nueva alimentación sana te ayudará a sentirte mejor contigo misma, con más energía, más vital y más capaz de enfrentarte a cualquier reto que te depare tu vida.

Contacta con nosotros para empezar a cuidar tu cuerpo desde dentro y hacer que todo ello se refleje en tu exterior. ¡No te arrepentirás!

Llama ahora y reserva cita para una consulta, en el 955 54 60 20. ¡Te esperamos!