Primeras arrugas que no cunda el pánico

He encontrado mi primera arruga ¿y ahora qué? Tranquila, todo tiene arreglo.

Las líneas finas de las primeras arrugas suelen aparecer por primera vez entre los 20 y los 30 años.

Normalmente se encuentran alrededor de la frente, la boca o las esquinas exteriores de los ojos.

Estos primeros signos de envejecimiento siempre parecen llegar cuando menos te lo esperas.

¿Fue durante esa inspección rutinaria en tu espejo con aumento? Un hábito que no aprobamos, para ser claros, pero ¿quiénes somos nosotros para decirte que dejes de hacerlo?.

Nos abstendremos de juzgar mientras te abstengas de apretar…

¿Fue durante un retoque rápido en tu espejo retrovisor? ¿O cuando miraste tu reflejo en la ventana de camino al trabajo y te diste cuenta de que no era la huella de las sábanas arrugadas de una mañana apresurada, sino el comienzo de una leve arruga?

La verdad es que el momento y el lugar en que se empiezan a ver las arrugas están en gran medida predeterminados por la genética.

¿Tienes curiosidad por saber cómo vas a envejecer?

Fíjate en tus padres y abuelos: la probabilidad de aparición de arrugas, su profundidad y su aspecto general están muy influenciados por las líneas familiares. Literalmente.

Primeras arrugas: Cómo envejecerá tu piel

Dicho esto, puedes prevenir las primeras arrugas, también llamadas arrugas prematuras.

Puedes minimizar el aspecto de las arrugas (dónde se desarrollan, su profundidad y longitud, etc. ) con los cuidados adecuados.

Aunque hayas encontrado tu primera arruga, no te preocupes, hay muchas maneras de mantener a raya el envejecimiento visible:

1. Aplícate protección SPF a diario, sin falta

Haz que una crema hidratante de amplio espectro y un protector solar para el cuerpo formen parte de tu rutina diaria de cuidado facial.

Los radicales libres son la causa número uno detrás del daño solar que conduce a líneas finas prematuras, flacidez, manchas oscuras y el desarrollo de aún más arrugas.

2. Toma precauciones adicionales cuando conduzcas

Todos conocemos la importancia de la aplicación de la protección solar y, si se pasa mucho tiempo al aire libre, de usarlas a menudo.

Lo que la mayoría de la gente pasa por alto es cuánto daño solar se produce mientras se conduce.

Los rayos UVA pueden atravesar fácilmente los cristales (tintados o no) de los vehículos, por lo que si viajas a diario o pasas más de unos minutos en el coche (conduciendo o no), es mejor que te asegures de tener protección con FPS.

Asegúrate de centrarte en la cara, el cuello, el escote y las manos. Esto ayudará a prevenir las primeras arrugas.

3. Duerme boca arriba

Favorecer un lado puede provocar que esas aparentemente inocuas huellas de las sábanas se conviertan en líneas y arrugas permanentes.

Pasamos al menos un tercio de nuestra vida durmiendo, lo que significa que pasamos al menos un tercio de nuestra vida grabando esas líneas en nuestro rostro.

¿Lo mejor que puedes hacer? Dormir boca arriba.

Otras formas de ayudar a reducir este tipo de arrugas extrínsecas son cambiar la funda de tu almohada habitual por una de seda (que es menos probable que tire o deje marcas en la piel) y variar tu posición al dormir.

4. Llevar un equipo de protección ocular adecuado

Lo que significa hacerse una revisión de los ojos con regularidad e invertir en un par de gafas de sol polarizadas.

Entrecerrar los ojos repetidamente puede agravar las líneas de expresión existentes, o favorecer la formación de otras nuevas, alrededor de los ojos, en el entrecejo y en la frente.

5. Bebe más agua

Hidratarse de dentro a fuera es crucial para la salud y el aspecto general de la piel.

Las células de la piel deshidratadas dan a la piel un aspecto cetrino, a veces ceniciento, lo que exagera el aspecto de cualquier signo visible de envejecimiento.

Sin embargo, cuando las células están bien hidratadas, la piel parece (y se siente) más suave y flexible.

6. Haz de la hidratación una prioridad

Hay que hidratar de dentro a fuera y de fuera a dentro.

Busca cremas hidratantes y de noche que te ayuden a proporcionar la hidratación esencial y a fijar la humedad en la piel. Esto es esencial para retardar la aparición de las primeras arrugas.

Los humectantes y/o emolientes pueden ayudar a suavizar las líneas de expresión y las arrugas al rellenar la piel para darle un aspecto más joven.

7. Incorpora productos antienvejecimiento a tu rutina de cuidados

Si aún no has empezado, hazlo ahora.

Los sérums y las cremas formulados con potentes ingredientes antienvejecimiento pueden ayudar a ralentizar los signos de la edad defendiendo la piel de los daños causados por el medio ambiente y los radicales libres, al tiempo que reducen el aspecto de todos los signos visibles del envejecimiento.

8. Evita el tabaco y el alcohol

Si necesitas otra razón para dejar de fumar, añade las arrugas prematuras a la lista.

Fumar puede acelerar el proceso normal de envejecimiento de la piel, contribuyendo a la aparición de arrugas y otros cambios en el aspecto de la cara.

Entre estos cambios se encuentran las patas de gallo, las líneas pronunciadas en el entrecejo, una tez desigual, un tono grisáceo en la piel clara, pliegues profundos e hinchazón debajo de los ojos, arrugas alrededor de la boca y labios más finos.

Cuantos más cigarrillos fumes y cuanto más tiempo fumes, más probabilidades tendrás de desarrollar arrugas y otros cambios asociados a la edad en tu rostro.

El otro factor principal que puede controlar y que provoca daños en la piel es el consumo de alcohol.

El alcohol puede afectar seriamente a la piel de una persona. Para empezar, el alcohol puede reducir los niveles de vitaminas, como la vitamina A, que son cruciales para la salud de la piel.

El agotamiento de la vitamina A puede reducir los niveles de colágeno, lo que puede dar lugar a arrugas prematuras, así como a una pérdida de elasticidad y plenitud en el rostro.

El alcohol también puede causar deshidratación, lo que puede contribuir a la aparición de arrugas en el rostro, así como a una piel excesivamente seca.

Otros efectos que el alcohol puede tener en la piel son:

• Piel amarillenta
• Arañas vasculares
• Mayor riesgo de infecciones cutáneas
• Empeoramiento de las afecciones cutáneas existentes
• Sarpullidos
• Cambios en el color de la piel.

Primeras arrugas: Controla tu piel, pero no te obsesiones

Una vez que empieces un régimen antienvejecimiento, deberías ver mejoras en el tono y textura de tu piel en unas tres o cuatro semanas.

Si te encuentras con una meseta, habla con tu dermatólogo para que te cambie los productos, o quizás quieras considerar los procedimientos láser en algún centro de medicina estética, que pueden ayudar a tensar la piel.

Sin embargo, no hay una solución mágica. No se puede detener por completo el proceso de envejecimiento de la piel.

Es mejor no centrarse en cada arruga y evitar definitivamente examinar la cara con mala iluminación, que puede hacer que las líneas menores parezcan grandes grabados.

Si tienes una mentalidad sana y sigues una rutina de cuidado de la piel consistente, comes bien, descansas lo suficiente, no tomas tóxicos y te proteges con FPS, estás haciendo todo lo correcto para lucir un aspecto radiante.

En Carmen Sarmiento tenemos excelentes tratamientos que mantendran tu piel perfecta durante muchos años, como nuestro tratamiento Vitality Skin Radiant y excelentes productos de rigurosa calidad para el cuidado diario.

Llámanos y te aconsejaremos lo mejor para tu piel.